

Seguramente te has planteado alguna vez si el pienso es realmente lo mejor para tu perro o si deberías probar con la dieta BARF. Esa misma pregunta se la hacen cada vez más dueños de mascotas, y es que, aunque ambos tienen ventajas, también tienen sus desventajas.
En este artículo vamos a analizar las diferencias entre la dieta BARF y el pienso industrial, para que puedas tomar la mejor decisión en función de las necesidades de tu peludo. Hablamos de ventajas, desventajas y todo lo que debes saber antes de dar el paso.
Diferencias entre el pienso y la dieta Barf
La dieta BARF se basa en ofrecerle a tu perro alimentos naturales, crudos y frescos. Aquí no hay subproductos ni ingredientes procesados, todo es carne, vísceras, huesos y un toque de verduras y frutas. Es un estilo de alimentación mucho más cercano al que seguiría un perro en la naturaleza, como si aún fueran cazadores y carroñeros. Y esa es una de sus principales ventajas: lo que comes es más cercano a lo que tu perro necesita para mantenerse saludable.
Con el pienso, por otro lado, te enfrentas a un proceso industrial que implica la transformación de ingredientes a altas temperaturas, donde se pierden muchas propiedades. Harinas, subproductos, conservantes, saborizantes y colorantes son solo algunos de los ingredientes que encontrarás en la mayoría de los piensos comerciales. En definitiva, es un producto más procesado y menos natural.
La digestión y el bienestar de tu perro
El sistema digestivo de tu perro está diseñado para procesar alimentos crudos. Esto significa que, al elegir la dieta BARF, le das la oportunidad de comer como la naturaleza manda. Con la comida cruda, la digestión es mucho más eficiente y, por lo tanto, las heces de tu perro son más pequeñas, más firmes y mucho menos malolientes.
Lo curioso es que muchos perros con problemas digestivos crónicos, como diarreas recurrentes o gases, mejoran notablemente simplemente cambiando a una dieta natural. No es magia, es ciencia. Los alimentos frescos y naturales permiten que el organismo de tu perro trabaje como debería, sin necesidad de recurrir a aditivos o ingredientes artificiales.
Pelo suave, brillante y sin caspa
Otro de los beneficios evidentes de la dieta BARF es el pelo. Los ácidos grasos esenciales, las proteínas crudas y el zinc en la carne y las vísceras hacen maravillas. Los perros y gatos que siguen este tipo de dieta suelen tener un pelo más brillante, suave y sin caspa. La piel también mejora: menos picazón, menos irritaciones.
Y lo mejor de todo es que no necesitas productos de cuidado especiales. La alimentación lo hace todo, gracias a que tu perro recibe nutrientes de alta calidad que son fáciles de asimilar.
Energía equilibrada, sin picos ni bajones
Los perros alimentados con pienso a menudo sufren altibajos de energía. Un momento están súper activos y al rato caen como si hubieran estado corriendo una maratón. Esto se debe a los altos carbohidratos del pienso, que causan picos de glucosa en sangre seguidos de bajones.
Con la dieta BARF, el cuerpo de tu perro tiene una liberación constante de energía, lo que resulta en un perro con más vitalidad, más ganas de jugar y explorar, pero sin los efectos secundarios de la hiperactividad o el cansancio excesivo.
El control total sobre lo que come
Uno de los puntos fuertes de la dieta BARF es que tú decides lo que tu perro come. No hay ingredientes ocultos ni sorpresas. Si tu perro tiene intolerancias o alergias alimentarias, con BARF puedes ajustar su dieta fácilmente y asegurarte de que recibe solo lo que le beneficia.
Si tu perro tiene problemas de piel, digestivos o articulares, con BARF puedes adaptar su alimentación para mejorar esas condiciones, mientras que con el pienso, puede que no siempre sepas qué es lo que le está afectando.
Las desventajas de la dieta BARF
No todo es perfecto, claro. La dieta BARF también tiene sus inconvenientes. Es normal que los dueños de mascotas se sientan un poco intimidados por la idea de cambiar la alimentación de su perro. Aquí van algunas de las posibles desventajas.
Más trabajo en la preparación
Preparar la comida BARF para tu perro requiere algo de esfuerzo. Es necesario comprar los ingredientes frescos, preparar las raciones y almacenarlas correctamente para evitar que se deterioren. Aunque algunas marcas ya ofrecen menús prehechos, lo cierto es que la dieta cruda requiere más dedicación que simplemente abrir un saco de pienso.
Esto puede ser un inconveniente si tienes poco tiempo o prefieres la comodidad. Sin embargo, muchas personas descubren que, una vez se acostumbran a la rutina, se convierte en un hábito fácil de llevar.
Riesgo de infecciones bacterianas
El alimento crudo tiene un mayor riesgo de contener bacterias como Salmonella o E. coli, que pueden ser perjudiciales tanto para tu perro como para ti. Es esencial tener mucho cuidado con la manipulación y almacenamiento de la carne cruda. Asegúrate de usar ingredientes de calidad, de mantener una higiene rigurosa en la preparación y de conocer las mejores prácticas de manejo de alimentos crudos.
Desequilibrio nutricional
Aunque la dieta BARF es una opción natural, no es infalible. Si no estás seguro de cómo equilibrar correctamente las carnes, vísceras, huesos y verduras, podrías terminar con una dieta desequilibrada para tu perro. En el caso del pienso, la fórmula ya está balanceada para ofrecer una nutrición completa, lo que elimina este riesgo. Si decides probar con BARF, es importante contar con la asesoría de un experto o de una fuente confiable para evitar posibles deficiencias nutricionales.
El precio de la dieta Barf
La dieta BARF suele ser más cara que el pienso. La dieta Barf al estar compuesto por ingredientes frescos y de calidad, sobre todo si son aptos para consumo humano, tienen un precio más alto. Si tienes varios perros o uno de gran tamaño, los gastos en comida cruda pueden ser sustanciales.
En Naturabarf te lo ponemos fácil
Sabemos que al principio cambiar de pienso a BARF puede dar un poco de respeto. Por eso, en Naturabarf:
- Te ayudamos con menús equilibrados y listos para servir
- Tenemos opciones para perros, gatos y hurones
- Usamos solo ingredientes frescos, de calidad apta para consumo humano
- Te asesoramos en la transición para que sea segura y gradual
¿Y ahora qué?
Si estás pensando en hacer el cambio, este es tu momento.
Tu peludo no puede tomar esta decisión por sí solo, pero tú sí.
Y cuando lo veas más feliz, más activo, con mejor salud y devorando su plato… vas a saber que hiciste lo correcto.
¿Listo para dar el salto a lo natural?
Tu perro, tu gato o tu hurón te lo va a agradecer todos los días. 🐾💚

